Chicamocha News – 30 de julio de 2021
Este 26 de julio, la Superintendencia de Salud, dependencia del Ministerio de Salud y protección social colombiano, tomó la decisión de intervenir para su liquidación a la EPS- COMPARTA, argumentando múltiples razones, dentro de las que se destacan su incumplimiento en unos indicadores que miden la oportunidad en la atención médica general, especializada, entrega de medicamentos, trato del paciente, trámite de autorizaciones, las cuales evalúa a través de una metodología de encuestas y otros indicadores netamente financieros que miden la capacidad económica de la empresa para disminuir el riesgo financiero en la contratación de los servicios de salud, y que este proceso se venía adelantando desde hace 5 años, dándole 9 prorrogas a la medida y que finalmente la EPS-COMPARTA no logró mejorar o cumplir.
Sin embargo, según un documento publicado por el Ministerio de Salud en
la página https://adresfosyga.com/las-mejores-eps-de-colombia-2021/, donde
clasifica a las mejores EPS del país, se contradice con la resolución de la
Supersalud, sobre la liquidación de la EPS – COMPARTA, ya que, (como se
observa en el cuadro), esta EPS, no es la peor y cumple con 9 de 15
indicadores y está calificada con 72,17 puntos sobre 100, ocupando el puesto
número 23 entre 40 EPS que existen en el país. Los datos publicados por el
Ministerio de salud provienen de “Experiencia de la atención: Quejas-EPS,
Fidelidad con EPS 2019”, datos generados por la encuesta de evaluación de los
usuarios del documento “Sistema de Evaluación y Calificación de Actores.
Difusión de Indicadores 2020. Ministerio de Salud y Protección Social. Oficina
de Calidad. (Ver enlace).
Lo anteriormente expuesto me permite considerar la posibilidad de que los
argumentos de la Supersalud para intervenir y liquidar a la EPS-COMPARTA, no
son suficientemente demostrados técnicamente y contradicen totalmente las
evaluaciones reportadas por el Ministerio de Salud. Entonces, ¿cuáles son las
verdaderas razones para tomar esta decisión?
Detrás de
estas liquidaciones unilaterales que hace la Supersalud, se mueven muchos
intereses, principalmente económicos y políticos. Vale la pena traer a colación
un hecho que fue descubierto por la Fiscalía General de la Nación en octubre de
2018, dentro de la denominada “OPERACIÓN QUIRÓFANO”, donde capturan a tres
funcionarios de la Supersalud, de Saludcoop y Cafesalud por conformar una red
de corrupción ligada a esta primera entidad.
“Según
información suministrada por la Fiscalía, los funcionarios de la
Superintendencia de Salud crearon un catálogo de servicios que ofrecían a cambio
de grandes sumas de dinero. Estos servicios consistían en agilizar los pagos
retenidos a las EPS intervenidas como Cafesalud, proporcionar información
respecto a tramites de inspección y vigilancia de carácter financiero, influir
en trámites de reorganización para tomar decisiones y facilitar y dirigir las
afiliaciones a ciertas EPS y así poder recibir más recursos del Estado.
Al parecer, en
los audios obtenidos por las interceptaciones de la Fiscalía se escucharon los
nombres de algunos parlamentarios con un presunto interés en el manejo de los
recursos destinados a las EPS”. https://www.fiscalia.gov.co/colombia/fiscal-general-de-la-nacion/con-esta-investigacion-queda-probado-que-los-corruptos-hacen-fiestas-en-el-sistema-de-salud-en-detrimento-de-la-integridad-del-servicio-a-los-colombianos-fiscal-general/
En los
corrillos políticos se especula que el actual Superintendente de salud, quien
ha sido un militante del partido Centro Democrático, y que aspiró al Senado en
las pasadas elecciones parlamentarias, renunciará a su cargo para aspirar al
Senado de la Republica el año que viene y que, según el Senador Antonio
Sanguino en su columna de opinión denominada “LAS TRAVESURAS DEL SUPERSALUD, en
algunos apartes se refiere al Superintendente en las siguientes palabras: “Una
primera travesura tiene origen electoral. Resulta que detrás de los pergaminos
técnicos que exhibe, el Supersalud Aristizábal esconde una activa vocación de
militante y varias candidaturas por el Centro Democrático. Su última y fallida
aventura electoral fue en las pasadas elecciones parlamentarias. Fue candidato
al Senado de la República y recibió un aporte de cincuenta millones de pesos de
la Organización Sanitas Internacional S.A.S hoy Keralty S.A.S, grupo
empresarial propietario de la EPS Sanitas. Esta entidad es hoy objeto de
vigilancia del excandidato al Senado y hoy Supersalud. Fabio Aristizábal nunca
ha manifestado su conflicto de interés en sus actuaciones respecto a Sanitas.
Peor aún, conoció un recurso de reposición que interpuso esta EPS contra la
Resolución número 008683 de julio de 2018 de la Supersalud. Acto seguido,
mediante una nueva Resolución, la 011735 de diciembre de 2018, resolvió el
recurso a favor de Sanitas, que pasó de tener una capacidad de afiliación de
2.021.000 a 2.800.000 afiliados. Aristizábal le regaló a su financiador 779.000
nuevos cupos en su capacidad de afiliación, como contraprestación al aporte de
campaña recibido”.
“La segunda
es una travesura que de manera grave desconoce, retarda u omite las funciones
de vigilancia y control de la Superintendencia. Pareciera que su conducta
corresponde a un nuevo capítulo del “cartel de los usuarios” por el que fue
procesada penalmente la exfuncionaria de la Supersalud, Eva Carrascal, y en el
que ha sido mencionado José Oswaldo Bonilla Rincón, actual superintendente
delegado para la supervisión institucional. Un caso emblemático es el de
MEDIMAS: por medio de la Resolución No 005163 de 2017, la Supersalud adoptó
medida preventiva de vigilancia especial y la fue prorrogando con las
resoluciones 004770 de 2018, 009203 de 2019 y 001098 del 28 de febrero 2020. Lo
paradójico es que, bajo la vigencia de esas medidas preventivas, la propia Supersalud
sancionó a MEDIMAS con revocatorias parciales de funcionamiento en 15
departamentos. Una de dos, o la Supersalud hace una pésima labor de vigilancia
especial o el afán por trasladar usuarios a otras EPS amigas del Supersalud
explican esta protuberante contradicción”. https://www.senado.gov.co/index.php/component/content/article/13-senadores/2318-las-travesuras-del-supersalud-senador-antonio-sanguino?Itemid=101
El nombramiento como liquidador de la EPS COMPARTA,
del señor FARRUK URRUTIA JALILIE, deja presumir que es un tema eminentemente
político, ya que su hoja de vida solo resalta que es el director del Centro
Democrático en el departamento del Cesar y el año 2002 fue vicepresidente del
Instituto de Seguro Social (ISS), bajo la presidencia de Álvaro Uribe Vélez.
Queda claro que Colombia es un país netamente
politiquero y que nadie controla a nadie, solamente se pagan favores políticos,
con entidades y recursos del Estado y sobretodo, con los recursos de la Salud,
pero con el agravante de poner en riesgo la vida y la salud de los menos
favorecidos.
Blanco es, gallina lo pone y frito se come… Adivinen.!